Autor: Juan Jacinto Muñoz Rengel Título: El asesino hipocondríaco Editorial: Plaza & Janés Año de publicación: 2012 215 páginas ISBN: 978- 84- 01- 35225-6 |
La actividad bloguera se ha ralentizado últimamente, pero las ocupaciones estudiantiles se han llevado parte del "protagonismo", aun así he seguido leyendo y una de las novelas que he podido acabar durante estos días es la que deseo compartir en el día de hoy.
La ingente cantidad de novedades literarias que se publican cada año hace imposible que se tengan en cuenta ciertas obras o determinados autores. Quiere la casualidad que de tanto en cuanto encuentre novelas de autores poco conocidos (o mejor debería apuntar autores que no tienen las mismas oportunidades -por motivos editoriales o por otras cuestiones que en realidad se me escapan dado mi desconocimiento en la materia- que otros novelistas en cuanto a divulgación comercial se refiere) que me atraen de tal manera que les doy una oportunidad como lector. Y debo apuntar que las expectativas creadas se han superado con creces.
Leída la novela no sabría identificarla con un género concreto, pues aunque tiene, a mi parecer, pinceladas de género negro no se ajustaría a los patrones habituales de este tipo de obras literarias.
¿Quién es Juan Jacinto Muñoz Rengel? Es un autor español muy conocido por sus relatos (dos de sus libros de relatos son 88 Mill Lane, De mecánica y alquimia, obras que han sido valoradas hasta el punto que han sido finalistas de distintos galardones como el Premio Setenil) y que se ha pasado a una extensión más amplia de la narrativa hace relativamente poco. De hecho, El asesino hipocondríaco, su primera novela, se publicó en el año 2012.
¿Es posible encontrar a un personaje literario que padece mil y una dolencias y que le imposibilitan su quehacer diario o le impiden llevar a cabo, al cien por cien, un encargo como asesino profesional? La respuesta es afirmativa una vez leíDa la novela El asesino hipocondríaco. Y es que nos encontramos en esta obra de Juan Jacinto Muñoz Rengel con un personaje peculiar aquejado de todas las dolencias y/o trastornos posibles.
El hilo argumental de esta peculiar novela aborda el caso de un asesino profesional de ascendencia argentina que se describe de la siguiente manera:
" Por encima de todo, soy un hombre asediado por la mala suerte. Desde que tengo uso de razón, desde que era un niño endeble y quebradizo, el infortunio me ha perseguido en cada uno de mis movimientos por el mundo.
Si escojo entre dos direcciones, la otra era la acertada. Si salgo llevando conmigo el paraguas , lo pasearé todo el día por la ciudad sin darle ningún uso. Si pongo la otra mejilla, me golpearé en toda la nuca. Si alzo una mano para reclamar, probablemente sufriré una luxación en la clavícula"
[...] (página 16)
¿Quién es Juan Jacinto Muñoz Rengel? Es un autor español muy conocido por sus relatos (dos de sus libros de relatos son 88 Mill Lane, De mecánica y alquimia, obras que han sido valoradas hasta el punto que han sido finalistas de distintos galardones como el Premio Setenil) y que se ha pasado a una extensión más amplia de la narrativa hace relativamente poco. De hecho, El asesino hipocondríaco, su primera novela, se publicó en el año 2012.
¿Es posible encontrar a un personaje literario que padece mil y una dolencias y que le imposibilitan su quehacer diario o le impiden llevar a cabo, al cien por cien, un encargo como asesino profesional? La respuesta es afirmativa una vez leíDa la novela El asesino hipocondríaco. Y es que nos encontramos en esta obra de Juan Jacinto Muñoz Rengel con un personaje peculiar aquejado de todas las dolencias y/o trastornos posibles.
El hilo argumental de esta peculiar novela aborda el caso de un asesino profesional de ascendencia argentina que se describe de la siguiente manera:
" Por encima de todo, soy un hombre asediado por la mala suerte. Desde que tengo uso de razón, desde que era un niño endeble y quebradizo, el infortunio me ha perseguido en cada uno de mis movimientos por el mundo.
Si escojo entre dos direcciones, la otra era la acertada. Si salgo llevando conmigo el paraguas , lo pasearé todo el día por la ciudad sin darle ningún uso. Si pongo la otra mejilla, me golpearé en toda la nuca. Si alzo una mano para reclamar, probablemente sufriré una luxación en la clavícula"
[...] (página 16)
Y este asesino profesional, aquejado de mil y un dolores, y víctima de infinidad de situaciones de mala suerte recibe el encargo de matar a un hombre de negocios - Eduardo Blastein es su nombre- , pero las diferentes oportunidades de acometer esta acción, así como las persecuciones u otras acciones relacionadas con el asesinato que debe acometer, se ven interrumpidas por cuestiones relacionadas con la mala fortuna o por "incompetencia" del mismo asesino.
Combina Juan Jacinto Muñoz Rengel en esta su primera novela, publicada en 2012, la narración de las acciones o las variadas situaciones del verdugo y de su víctima con la intercalación de episodios en los que el mismo personaje principal, el asesino a sueldo, explica las dolencias y/o enfermedades que padecieron en su tiempo escritores relevantes del panorama literario internacional. Un ejemplo de esto mismo que podemos encontrar en la novela sería este fragmento:
"Por encima de todo, Edgar Allan Poe, como yo, fue un hombre asediado por la mala suerte. Desde que tuvo uso de razón, desde que de niño se supo heredero de las enfermedades y el alcoholismo de sus padres nómadas desde que se viera subido en la caravana de carromatos destartalados y mugrientas de aquella compañía de cómicos, el infortunio le persiguió en cada uno de sus movimientos por el mundo."
[...] (página 37)
Si en este fragmento de ejemplo se plantea el caso de uno de los precursores de la novela negra, de la novela de detectives- como es el de Edgar Allan Poe- , a lo largo de la novela se abordan los casos de otros autores que, según narra el autor mediante la voz del asesino a sueldo (una voz narrativa que en toda la novela es en primera persona), padecieron algunas o buena parte de las dolencias que al personaje se le observan como : Descartes, Lord Byron, Kant, etc.
Explicar mucho más de la novela sería desvelar parte de la trama y dejar sin efecto ciertas situaciones que invitan a esbozar más de una sonrisa, tanto por las dosis de humor elegante que destila el autor en sus páginas como por las diferentes situaciones que los dos personajes protagonistas de la obra viven. Novela, por tanto, totalmente recomendable, pese a que puede pasar desapercibida. Aun así vale la pena descubrirla.
Me había llamado la atención, pero dudaba sobre ella. Ya no, me la apunto :-)
ResponderEliminarSuena curioso, ya sin decir nada de la portada que sugiere más bien una novela de ciencia-ficción o de terror.
ResponderEliminarsaludos
Lo tengo en la estantería desde hace bastante, al principio me apetecía leerlo por las opiniones que había visto pero luego me fui desanimando al no tener claro si lo disfrutaría tanto, a ver si algún día me animo a rescatarlo
ResponderEliminarBesos
¡Hola! Al parecer, y según he leído en tu reseña, más que hipocondríaco parece que es gafe ¿no? Si cosa que hace cosa que le sale mal... En fin, me ha llamado mucho la atención esta novela, que no conocía, y desde ahora queda apuntada para comprarla en cuanto tenga oportunidad. Un saludo.
ResponderEliminar