miércoles, 3 de septiembre de 2014

Decepciones literarias (II): La analfabeta que salvó un país


Autor: Jonas Jonasson
Título: La analfabeta que salvó un país
Año de publicación: 2013
Editorial: La Campana
389 páginas
ISBN: 978-84-96735-97-2

   Segundas partes nunca fueron buenas. O esa es la máxima que muchas veces se ha escuchado acerca de algunas películas que resultaron ser un éxito de público y que luego en una continuación resultaron ser un pequeño fracaso (salvo contadas excepciones). También se puede aplicar este aspecto en materia literaria, aunque en el caso que nos ocupa en la entrada del día de hoy no puede decirse que sea la continuación de una novela anterior del autor en cuestión como si de una trilogía o una saga se tratase.

   Bien es verdad que cada lector tiene sus impresiones y como apunté tiempo atrás en una entrada anterior lo que me puede agradar a mí tal vez a otra persona no le interese o  no le capte la atención suficiente como para cautivarle o viceversa.

    Creo que, y esto es impresión personal- y tal vez tema de debate- hay novelas que sí entretienen, pero son de corto recorrido. Esto es, novelas que por la dinámica, por la trama de la novela, por la sucesión de hechos que se suceden a lo largo de sus páginas, invitan a leerla, a esbozar una sonrisa (o más de una), mas no llegarán mucho más lejos. Sí, verdad es que la lectura es un acto de entretenimiento, pero también debe ser un acto en el que la novela en sí te aporte algo más, te permita adentrarte (y no de manera parcial) por senderos por descubrir.

   Mas como apuntaba todo lector tendrá sus impresiones al respecto, y tal vez genere un debate (¿innecesario?)...Así pues, iré al grano, a comentar la novela en cuestión.

    De Jonas Jonasson, periodista y escritor sueco (y ¡oh milagro! ¡no escribe novela negra!), poco se puede decir ya que no se haya publicado, y más después del éxito  de ventas y críticas que generó la publicación de su primera novela: El abuelo de 100 años que se escapó por la ventana. Su segunda novela, La analfabeta que salvó un país está teniendo la misma suerte.

     Iniciaba la entrada del día de hoy comentando que segundas partes no eran buenas. No es La analfabeta que salvó un país una continuación de la primera novela publicada por este autor, pese a que el estilo, la dinámica narrativa, la sucesión de hechos, a cada cual más surrealista o gracioso, son similares. Si en la primera novela el personaje principal era un abuelo de 100 años que se escapó por la ventana y que había vivido algunos de los acontecimientos más relevantes del mundo del siglo, en esta segunda obra los protagonistas -también personajes con alguna característica especial que invitan al toque de humor- son por un lado una niña analfabeta- de nombre Nombeko- de un gueto de Soweto, población de la Sudáfrica del apartheid que trabaja limpiando letrinas hasta que consigue salir de allí e iniciar un nuevo camino; y por otro Ingmar Qvist, un empleado de correos, del escalafón más bajo, que tiene la particularidad de ser un monárquico empedernido hasta que, después de un encuentro casual con el rey Gustavo V, del que no sale muy bien parado, se convierte en un republicano de armas tomar trasmitiendo sus ideas a sus dos hijos gemelos idénticos.

    La novela se estructura en tres partes: la primera y la segunda explican las singularidades y vivencias de los dos personajes principales indicados, mientras que la tercera parte ya existe una conexión con los dos personajes. En el caso del empleado de correos la relación es más directa es con sus dos hijos, del que- por cuestiones del "destino"- uno de ellos no existe oficialmente para la administración.

   Comentar algunas de las vivencias, de las locuras de los personajes principales, y de los secundarios que van apareciendo a lo largo de toda la novela, sería tal vez generar un spoiler para aquellas personas que posiblemente no hayan leído el libro y deseen hacerlo. Así que, solo resaltar, como indicaba antes, que el estilo de esta novela es similar a la primera publicada con lo que uno puede intuir que la sucesión de "locuras" es resaltable e inevitable. Sí que resulta interesante las críticas hacia el Apartheid, la descripción de la miseria vivida por Nombeko.

  


   

   

3 comentarios:

  1. A mi no me desagradó del todo pero es demasiado similar a la primera...Parece que leas lo mismo con distintos personajes.

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  2. Me gusta este tipo de historias pero antes de aventurarme con este libro le voy a dar una oportunidad al del abuelo... todos hablan muy bien de él y creo que puede estar entretenido. buena reseña y ya te cuento¡¡ un abrazo¡¡¡

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  3. De momento no he probado ningún libro de este estilo así que no me aventuraré a empezar con este, pero buscaré otro con el que empezar.
    ¡besos!

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